Una receta que está para chuparse los dedos, al menos eso es lo que pensamos todos los de casa, la cazuelita se queda pequeña y en lugar de un huevo me piden que ponga dos. Es un plato que no tiene ninguna complicación, lleva ingredientes muy básicos, por lo que no hace falta esperar a ningún evento especial para ponerla en la mesa, tan sólo coincidir los cuatro a comer.
ingredientes
4 huevos
200 ml de nata para cocinar
160 g de puerros
150 g de queso emmental rallado
1-2 patatas (opcional)
50 g de mantequilla
1 cucharada de aceite
elaboración
Precalentar el horno a 180 ºC.
Pelamos, lavamos, secamos las patatas y las partimos en rodajas no demasiado gruesas. Las vamos dorando en una sartén con una fina película de la grasa que nos ha sobrado de pochar los puerros. Una vez doradas las escurrimos y cubrimos con ellas el fondo de las cazuelitas, teniendo en cuenta que se puedan meter luego al horno.
En un bol mezclamos los puerros, la nata y el queso, repartimos esta mezcla en las cazuelitas, cubriendo las patatas y las metemos en el horno durante unos 12 minutos o hasta que comiencen a dorarse. Pasado ese tiempo cascamos un huevo sobre cada cazuelita y lo volvemos a meter en el horno hasta que esté cuajado, unos 4-5 minutos, cuidando de que no se nos pasen.
Sacar las cazuelitas y servir en seguida.
Con el relleno de puerros de estas cazuelitas podemos rellenar unos canelones.
No hay comentarios: