60 ml de leche
50 g de azúcar
15 g de azúcar invertido
60 g de mantequilla troceada
15 g de levadura fresca
2 huevos, 100 g
300 g de harina de fuerza tamizada
1/2 cucharadita de sal
ralladura de naranja
10 ml de ron
10 ml de agua de azahar
1 huevo batido para pintar
almendra, azúcar, fruta escarchada...
para decorar
nata montada para rellenar
elaboración
Como siempre, podemos amasar los ingredientes a mano o con ayuda de una máquina, batidora con ganchos, panificadora... yo lo he he hecho en ésta.
Vertemos la leche en la cubeta, a la que añadimos los huevos ligeramente batidos, el azúcar, el azúcar invertido, la ralladura de naranja, el ron, el agua de azahar y la sal, por último añadimos la harina y la levadura desmigada. Como veis todos los ingredientes a excepción de la mantequilla. Ponemos en marcha la panificadora en el programa de amasado, en la mía es el número 7 y dura 15 minutos.
Cuando se hayan mezclado todos los ingredientes incorporamos poco a poco los trozos de mantequilla y dejamos que termine el programa. Vemos que la masa pasa de dura a blanda, es normal, se irá arreglando a medida que se incorpore y se absorba toda la mantequilla, no hay que añadir más harina. Una vez que terminen los 15 minutos, programamos de nuevo el mismo programa durante otros 15 minutos más. La masa estará lista cuando se despegue perfectamente de las paredes de la cubeta, deberá estar muy lisa y brillante.
Una vez que la masa esté lista, la sacamos de la cubeta, hacemos una bola y la colocamos en un recipiente amplio, ligeramente engrasado, lo cubrimos con papel film y la dejamos a temperatura ambiente hasta que doble su volumen, el tiempo dependerá de la temperatura ambiente.
Una vez que haya doblado su volumen, sacamos la masa del bol, la pasamos a la mesa y la damos un ligero amasado para desgasarla. Hacemos una bola con la masa y dejamos que repose bien tapada 15 minutos para que se relaje y podamos formar bien el roscón.
Transcurrido este tiempo nos untamos las manos con un poco de aceite y metemos un par de dedos por el centro de la bola, hasta tocar la mesa, hacemos un agujero, cogemos la masa con las dos manos y la vamos estirando suave y homogéneamente como si de una correa se tratará, el agujero se irá formando con su propio peso. Hay que tener en cuenta que con el levado este agujero tenderá a cerrarse, por lo que tiene que ser un poco hermoso. Hay que intentar que el grosor de la masa sea parecido en todo el contorno. Colocamos el roscón sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear, dejamos reposar la masa bien cubierta unos 5 minutos y hacemos los retoques necesarios.
Una vez formado lo pintamos con huevo batido y lo dejamos reposar cubierto con papel film transparente engrasado de una a dos horas, dependerá de la temperatura ambiente, prácticamente casi tiene que doblar su volumen.
Una vez levado el roscón, lo pintamos de nuevo con huevo batido, lo decoramos a nuestro gusto con fruta confitada, almendras, azúcar humedecida con unas gotas de agua...
Metemos el roscón en el horno precalentado a 190 ºC con calor arriba y abajo durante unos 20 minutos. Si vemos que coge color enseguida lo tapamos con papel aluminio. Pasado este tiempo lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla.
Tal cual esta buenísimo pero rellenarlo es otra opción, lo podemos rellenar con crema de trufa, nata montada, crema pastelera...
50 g de azúcar
15 g de azúcar invertido
60 g de mantequilla troceada
15 g de levadura fresca
2 huevos, 100 g
300 g de harina de fuerza tamizada
1/2 cucharadita de sal
ralladura de naranja
10 ml de ron
10 ml de agua de azahar
1 huevo batido para pintar
almendra, azúcar, fruta escarchada...
para decorar
nata montada para rellenar
elaboración
Como siempre, podemos amasar los ingredientes a mano o con ayuda de una máquina, batidora con ganchos, panificadora... yo lo he he hecho en ésta.
Vertemos la leche en la cubeta, a la que añadimos los huevos ligeramente batidos, el azúcar, el azúcar invertido, la ralladura de naranja, el ron, el agua de azahar y la sal, por último añadimos la harina y la levadura desmigada. Como veis todos los ingredientes a excepción de la mantequilla. Ponemos en marcha la panificadora en el programa de amasado, en la mía es el número 7 y dura 15 minutos.
Cuando se hayan mezclado todos los ingredientes incorporamos poco a poco los trozos de mantequilla y dejamos que termine el programa. Vemos que la masa pasa de dura a blanda, es normal, se irá arreglando a medida que se incorpore y se absorba toda la mantequilla, no hay que añadir más harina. Una vez que terminen los 15 minutos, programamos de nuevo el mismo programa durante otros 15 minutos más. La masa estará lista cuando se despegue perfectamente de las paredes de la cubeta, deberá estar muy lisa y brillante.
Una vez que la masa esté lista, la sacamos de la cubeta, hacemos una bola y la colocamos en un recipiente amplio, ligeramente engrasado, lo cubrimos con papel film y la dejamos a temperatura ambiente hasta que doble su volumen, el tiempo dependerá de la temperatura ambiente.
Una vez que haya doblado su volumen, sacamos la masa del bol, la pasamos a la mesa y la damos un ligero amasado para desgasarla. Hacemos una bola con la masa y dejamos que repose bien tapada 15 minutos para que se relaje y podamos formar bien el roscón.
Transcurrido este tiempo nos untamos las manos con un poco de aceite y metemos un par de dedos por el centro de la bola, hasta tocar la mesa, hacemos un agujero, cogemos la masa con las dos manos y la vamos estirando suave y homogéneamente como si de una correa se tratará, el agujero se irá formando con su propio peso. Hay que tener en cuenta que con el levado este agujero tenderá a cerrarse, por lo que tiene que ser un poco hermoso. Hay que intentar que el grosor de la masa sea parecido en todo el contorno. Colocamos el roscón sobre una bandeja de horno forrada con papel de hornear, dejamos reposar la masa bien cubierta unos 5 minutos y hacemos los retoques necesarios.
Una vez formado lo pintamos con huevo batido y lo dejamos reposar cubierto con papel film transparente engrasado de una a dos horas, dependerá de la temperatura ambiente, prácticamente casi tiene que doblar su volumen.
Una vez levado el roscón, lo pintamos de nuevo con huevo batido, lo decoramos a nuestro gusto con fruta confitada, almendras, azúcar humedecida con unas gotas de agua...
Metemos el roscón en el horno precalentado a 190 ºC con calor arriba y abajo durante unos 20 minutos. Si vemos que coge color enseguida lo tapamos con papel aluminio. Pasado este tiempo lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar sobre una rejilla.
Tal cual esta buenísimo pero rellenarlo es otra opción, lo podemos rellenar con crema de trufa, nata montada, crema pastelera...
No hay comentarios: