18 nov 2015

garbanzos con borraja


Un potaje se prepara fácilmente y es una solución muy cómoda para comer legumbre y verdura, y si ya le añadimos un poco de carne, embutido o pescado tenemos un plato único estupendo. Hoy como se ve toca potaje de garbanzos con borraja. Una verdura muy consumida en Navarra y Aragón pero poco conocida en el resto de España, donde no es costumbre su consumo, aunque por suerte cada vez es más visible en las fruterías, al menos en las de aquí, pero si no la encuentras fresca es fácil encontrarla en conserva.


ingredientes 
400 g de garbanzos cocidos
225 g de borraja cocida
1 cebolleta
1 huevo cocido
1-2 dientes de ajo
2 cucharadas de salsa de tomate
un poco de pimentón dulce
1 rebanada de pan
sal y aceite










elaboración

Para cocer la borraja, lo primero separamos sus pencas, retiramos las hojas y las limpiamos, no nos tenemos que esmerar demasiado en quitarles todos los pelillos que tienen pues al cocerse quedarán en el agua, y los pocos que queden se limpian muy bien con sólo pasar los dedos por ellas. A medida que las vamos limpiando las dejamos sumergidas en un recipiente de agua bien fría.
Ponemos agua en una cazuela y en el momento que hierva colocamos las pencas, después de 5 minutos, las escurrimos. Las ponemos de nuevo al fuego en la cazuela, cubiertas con agua fría, y cuando comience a hervir de nuevo, salamos y dejamos que se terminen de cocer, teniendo cuidado de no sobrecocerlas. Las retiramos del fuego y las mantenemos en el agua hasta el momento de utilizarlas.




Si tenemos que cocer los garbanzos hay que acordarse de ponerlos a remojo con agua caliente y sal la noche anterior.
Al día siguiente ponemos a calentar agua con un poco de sal en una olla. Mientras se calienta pelamos 1 cebolla pequeña, 1 zanahoria, limpiamos 1 puerro y cortamos un trozo de pimiento verde. Estas verduras no están puestas en los ingredientes.
Cuando empiece a hervir el agua echamos los garbanzos, bien lavados y escurridos, tienen que quedar bien cubiertos, con dos dedos de agua por encima, por lo que si necesitamos más agua esta tiene que estar bien caliente. Añadimos en entero la cebolla, el puerro, el pimiento verde y la zanahoria. Tapamos la olla y cocemos durante 15 minutos, contando desde que suba el tapón de la válvula. Este tiempo dependerá de la olla, del garbanzo, del agua usada… Dejamos enfriar y abrimos la olla, comprobamos que el garbanzo esté hecho, si hay demasiado caldo retiramos un poco pero no lo tiramos, por si acaso hay que añadirlo más tarde y si nos hemos quedado cortos, pues añadimos un poco más de líquido caliente. Retiramos las verduras.




Calentamos aceite en una sartén y freímos la rebanada de pan, la sacamos y reservamos. En ese aceite freímos los ajos, los retiramos y reservamos.
A continuación añadimos la cebolleta picada, un poco de sal y la rehogamos a fuego lento hasta que comience a tomar color, agregamos el tomate, una pizca de pimentón, removemos y añadimos todo sobre los garbanzos. También añadimos la zanahoria cocida troceada y la borraja cortada en trozos no muy pequeños.
Por último machacamos en un mortero los dientes de ajo, la yema del huevo y el pan frito y lo agregamos también a la cazuela de los garbanzos.
Probamos el punto de sal y dejamos cocer a fuego suave otros 15 minutos, agregando más caldo si fuera necesario.
Podemos sustituir las borrajas por espinacas o por acelgas.
En el momento de servir picamos la clara del huevo cocido por encima.





No hay comentarios: